La maniobra del programa de Ana Rosa Quintana para conseguir en exclusiva las declaraciones de una pobre mujer ahogada por su propia ignorancia me parece deleznable. Volvemos siempre a la recurrente cuestión atribuida a Nicolás Maquiavelo ¿El fin justifica los medios? ¿Qué han de pensar los padres de la pequeña Mª Luz? ¿Cómo se sentirán?
Todo esto me recuerda muy mucho al dantesco espectáculo que otra gran profesional, Nieves Herrero, montó en un programa especial tras la desaparición y muerte de las niñas de Alcasser. ¿Lo recordáis? Yo perfectamente, un teatro abarrotado de público, unos padres hundidos por la desesperación y una periodista hurgando en la llaga del dolor. Quizás ahí empezó todo...
http://www.elmundo.es/elmundo/2011/02/26/television/1298678176.html
